Categoría: Insuficiencia cardíaca

Los cuidados al final de la vida para los pacientes con insuficiencia cardíaca tienen como objetivo garantizar el confort y la dignidad, adaptando los tratamientos a los deseos y necesidades del paciente, ya sea en su domicilio, en un hospital o en una unidad especializada.

Saber que un paciente con insuficiencia cardíaca corre el riesgo de fallecer en los próximos meses permite prepararlo, junto con sus seres queridos, para expresar sus objetivos de vida y planificar la intensidad de los cuidados futuros.

Los cuidados paliativos o de apoyo complementan el tratamiento de la insuficiencia cardíaca desde las primeras etapas, ayudando a mejorar la comodidad y la calidad de vida del paciente a lo largo de su trayectoria. Se brindan junto con las terapias habituales y pueden adaptarse a medida que avanza la enfermedad, teniendo en cuenta las necesidades y prioridades de la persona.

Un plan de acción individualizado es una herramienta esencial para las personas con insuficiencia cardíaca avanzada, ya que les permite reaccionar rápidamente ante cualquier empeoramiento de los síntomas y evitar la hospitalización. Comprenderlo bien y aplicarlo sin demora ayuda a controlar mejor la enfermedad y a preservar la calidad de vida.

Los llamados cuidados “activos” incluyen todos los tratamientos destinados a mejorar la calidad de vida diaria y a prolongar la esperanza de vida. Esta fase esencial en el manejo de la insuficiencia cardíaca se basa en dos componentes complementarios: los medicamentos y las medidas no farmacológicas.

La insuficiencia cardíaca es una enfermedad crónica que evoluciona en varias etapas. Comprender el papel de los cuidados paliativos y de apoyo permite mejorar la calidad de vida de los pacientes y anticipar mejor las necesidades en las fases avanzadas.

El síndrome de Takotsubo es una enfermedad cardíaca que pertenece a la familia de las miocardiopatías. También conocido como síndrome del corazón roto, balonización apical o miocardiopatía inducida por el estrés, este trastorno se caracteriza por un debilitamiento temporal del músculo cardíaco, a menudo como consecuencia de un estrés emocional o físico intenso.

La insuficiencia cardíaca es una enfermedad crónica que, aunque ha mejorado su pronóstico gracias a los avances en los tratamientos, sigue siendo una condición grave, especialmente para quienes presentan una fracción de eyección reducida.
Actualmente afecta a millones de personas en todo el mundo. En Canadá, aproximadamente el 1 % de la población adulta padece esta afección, una cifra que aumenta al 10 % en las personas mayores de 65 años.